infiernos que no existen
Hoy me he descubierto un poco más. Estoy de mil maneras... unos minutos nítida, y otros desdibujada. Susurro "síes" al teléfono, que son tan minúsculos y nocivos como piojos, cuando en realidad quiero decir, gritar, "noes" tan enormes como ballenas.
Me desvanezco, me bailo, y pienso en esos cristales omnipresentes de acuario gigante, mientras al fondo de la habitación suena un tema triste de Anthony and the Johnsons... Hoy es ese el hilo musical de todas y cada una de mis habitaciones.
Me apetece sumergirme. Me apetece que no te conviertas en un fantasma, mientras recorren mi cuerpo todos esos infiernos que no existen.
7 Comments:
Lentamente a medida que iban conversando,
mi ausencia psíquica seguía aumentando,
sólo quedaba ese pseudoespectante estado,
el de no pertenecer a ningún lado.
Obligado a mirar siempre hacia adelante,
me doy cuenta de que ya casi no existo.
Andar Volatil (como las parafinas)
Andar volatil (o como los alcoholes).
Firsa44, 2003.
Después de leerte y de recordar muchas de esas sensaciones que forman tu idioma de esta noche, y esperando que no te moleste, te voy prestar los versos de una poeta que a veces me pertenece.
“ PASEO POR EL ÁTICO DE MIS ÚLTIMOS DÍAS DE MUERTA”
Me siento sobre el borde rugoso de mi lista de cicatrices,
-cuelgan cada vez menos, los pies y la pena-
mengua su relieve el efecto de una risa
paseando el ático de mis últimos días de muerta.
Quiero que estés, aunque no me guste hacerme favores.
Conozco mi exigencia con los pagos y
me asusta pensar lo próximo que querré de mí
si tú estás, como hoy, haciéndole la competencia a los contornos
de mi horizonte.
Si y no. Yo a veces no diferencio entre uno y otro.
besotes
Anthony and the Johnsons está contraindicado para mi en estados de sensibilidad alta... Me lleva a lugares que preferiría no conocer.
Me gusta escucharle cuando no es capaz de llegarme dentro.
En fin, chorradas mías.
También yo quería comentar acerca de Anthony and The Johnsons. Una música para cada estado de ánimo. Mañana, quizá cambie tu banda sonora.
Suerte!
vaya semanita de despedidas...
Besos, mil
Creo que los "noes" sordos son los más valientes y desprendidos (horrible palabra para esta frase), aunque la pasión intente gritar deseperada entre los dedos de eso "noes".
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